(Por Soy Gourmet)

Bate la crema hasta que tome punto de pico firme,  luego agrega el azúcar y la esencia de almendras, sigue batiendo  para que se integren bien (debe quedar una crema suave). Por último, con movimientos envolventes añade las almendras peladas, tostadas y picadas.

 En un molde de tu agrado (preferiblemente cuadrado o rectangular), ve colocando las vainillas mojadas en la leche, hasta hacer una primera capa.

Luego agrega la crema con las almendras, sigue con otra capa de vainillas y así sucesivamente, hasta terminar con crema y decorar a tu gusto. Puedes caramelizar las almendras, triturarlas  y espolvorearlas  por encima o comprar  almendras garrapiñadas, picarlas  y también decorar con ellas. 

Lleva tu marquesa a la nevera, déjala enfriar muy bien, sirve y disfruta de este delicioso manjar de la gastronomía.  

Aquí te dejo unos tips muy buenos para optimizar tu receta. Esta torta, por tener crema de leche en su preparación, es importante que la mantengas en la nevera y preferiblemente consumirla en pocos días.

Siempre compra un poco de bizcochos de más, según el tamaño de tu molde puede que los necesites y si te rinde más la crema podrás hacer otra capa. 

 Puedes hacer una variación de la receta y utilizar almendras garrapiñadas picadas en lugar de las tostadas, también sustituirlas por nueces, avellanas, etc. Y crear una nueva marquesa.

Juega con tu imaginación y estoy segura, que pronto tendremos una nueva versión de la famosa torta marquesa.